Con Sylvia Galleguillos hemos desarrollado en los últimos años una metodología de orientación de personas que llamamos «Feng Shui Coaching». Son un conjunto de dinámicas de contemplación imaginaria – simbólica, o poética, si se quiere – de los caminos personales. Caminos ya andados, que es el momento cosechador. Y caminos por andar, o, mejor dicho: andables, rutas factibles, posibles (con toda su latencia y sortilegio… pues uno nunca sabe «su corazón, mañana, por dónde andará»), y ese es el momento germinal: cavilar poniendo en juego un cierto dinamismo creativo hasta sentir brotar algo como un impulso nuevo.
Alguien ha cerrado un ciclo, mal o bien: cumplió por centésima vez una meta airoso, y anhela nuevos desafíos, o al revés (un buen revés): le dieron el sobre azul. Entonces en el momento cosechador desgrana cada logro, cada plenitud vivida en la etapa que, buena o malamente, ya acabó: lo desgrana de su mazorca y lo ata a la solapa, confiriéndole dignidad de trofeo. Y en el momento germinante se pregunta: ¿ahora qué? ¿zarpar, seguir viaje o quedarse donde está? ¿por dónde ir? ¿desde y hasta dónde? ¿con qué «equipaje»? ¿cómo están sus «pies», sus «caderas», su «calzado» (todo eso en sentido figurado) para andar en adelante? ¿Qué va a hacer en encrucijadas, cómo elegir? ¿Cómo va a «hospedarse» en tránsito? (lecho mullido o allí dónde la pille la noche..?)
Ese tipo de preguntas las cavilamos en nuestras sesiones… a través de dinámicas lúdicas – pero más de juegos de salón y de tapiz que de cancha, ring o destreza corporal. La inspiración nos viene en gran medida de la riqueza simbólica y arquetípica de la cultura china y su cosmovisión: sus trigramas, sus signos animales, su simbología anclada en el paisaje. De ahí el nombre: «Feng Shui Coaching»
Sylvia trae a este proyecto sus 30 años de consultora de Feng Shui, donde ha oficiado de todo: consejera, guía, maestra, consoladora, partera (de los cambios), hasta casamentera…
Y yo traigo una inspiración fuerte en la literatura (sobre todo las grandes épicas de la humanidad) y el teatro, no sólo chinos sino universales, pues por veinte años he enseñado estudios teatrales, ecología de la mente y dramaterapia ritual en Inglaterra. Y eso me ha dejado con una «deformación profesional» que nos ayuda a imaginar y conducir dinámicas (nuevamente, son ejercicios de la imaginación más que físicos, no hacemos juegos de rol ni ponemos a nadie a actuar). Y sustentarlas, inspirarlas, en los grandes «imaginadores» de la humanidad, como Zhuangzi (sabio top daoísta), Vyasa (autor del Mahabarata), Homero (La Odisea), Faulkner (El sonido y la furia) y Shakespeare.
También puede pensarse este modelo de coaching que hacemos, entonces, como coaching «intercultural» o coaching (y esta si que es palabreja altisonante, ¡sorry!) «intertextual». Pues entreveramos en él textos de culturas distintas, de nuestra civilización y de otras. Y hacemos un esfuerzo requete grande por torcer nuestras miradas, para hacernos mirar nuestras situaciones vitales y profesionales como miran las suyas las gentes de otras culturas y no de la nuestra. Eso es Feng Shui Coaching. Si desea interiorizarse más, puede leer «La Cosecha Dorada. Feng Shui en la empresa y organización» (Grijalbo, 2008), libro escrito entre nosotros dos. Allí hay un capítulo entero dedicado a nuestro modelo de Feng Shui Coaching que hemos desarrollado.
En febrero del 2011, pensando también compasivamente en nuestros conciudadanos varados en un Santiago pelado y desertificado (nada como hallarse en un desierto para hacer nacerle rutas a uno), vamos a hacer una demostración del Feng Shui Coaching, gratuita, y el lema germinal será:
Para qué puede servir hablar con calaveras? Ocho gallitos de fuerza entre Shakespeare y Zhuangzi»
Lo dejo cordialmente invitado/a. Si va a estar en Santiago en Febrero, dése una vuelta, le garantizamos por lo menos una tarde entretenida y un encuentro práctico con dos personajes importantes de la literatura mundial. Además es gratis. Y si en su vida, en su trabajo, en su oficina o en su palacio, hay catacumbas con osamentas y «calaveras» con temas pendientes, no puede dejar de asistir.
Para saber la fecha en febrero, visite dentro de poco nuestro calendario.
Enzo Cozzi
Aquí va una muestra, para que la hojee, de las fichas con que solemos trabajar en ciertas sesiones altamente personalizadas de Feng Shui Coaching:
[book id=’1′ /]
Hola Enzo, he terminado de leer por tercera vez La cosecha dorada, y en cada lectura siempre he encontrado algo nuevo e interesante. Pero esta última lectura ha sido diferente, ya que tuvó una perspectiva distinta, fue apasionante conectar los episodios del libro con algunos de los maravillosos parajes que visitamos en China, por nombrasr algunos La carcel del Rey Wen.
Y gracias por profundizar en el tema del Feng Shui Coaching, tratare de viajar para participar en ese taller,
Saludos
Yessika Rodas
Silvia: La vi en el programa Conectados, pero ya había comenzado su entrevista.Soy Argentina.
Yo nací el 21 de julio de 1952 y se que soy dragón.
Me gusta mucho todo lo relacionado con el feng shui y el horóscopo chino.
Alcancé a escuchar solo algunas cosas que Ud. dijo. Si fuera posible, me encantaría me enviara la entrevista completa del programa porque me interesa mucho como colocar las cosas y cuáles son, dentro de la casa y su orientación: salud, familia, dinero, amor.
Si fuera posible, cómo nos va a ir a los dragones este año.Un gran cariño y respeto para Uds. Liliana
Hola Liliana, soy Enzo Cozzi y Sylvia me ha encargado responder a su comentario acá en el sitio web. Con respecto a la entrevista, Sylvia lamenta que no dispone de copias pero le agradece su interés por sus enseñanzas. Le sugiere comprar su libro «Feng Shui en el hemisferio sur», que sólo tiene un valor de $7.000 pesos chilenos más costo de envío a su país por correo. Allí ella trata exhaustivamente el tema que a Ud. le interesa, con multiplicidad de ejemplos prácticos. Para comprar el libro envíe un email a Feng Shui Chile a través de la página de contacto y le enviarán las instrucciones de pago.
Ahora al tema de fondo de su comentario y la razón por la cual Sylvia me encomendó a mí responderle, pues soy académico especialista en el calendario clásico chino. Debo darle una sorprendente noticia que sé que la va desasosegar y hasta a desazonar, y es que Ud. por haber nacido en el hemisferio sur en julio de 1952 no pertenece al signo dragón, sino que al signo perro. Sé que esto no le va a gustar nada, pues por haber nacido yo también en el año 1952, ¡sufrí un severo golpe a mi autoimagen cuando hace unos 15 años atrás, investigando directamente en los textos clásicos chinos el método de cálculo de los signos animales, me dí cuenta también que no era dragón sino perro! Tardé varios años en aceptar la idea (puesto que antes viví décadas de socialización y acostumbramiento a la idea de ser dragón y el dragón es de estirpe harto más encumbrada que el humilde perro) pero hoy le puedo decir que, para alguien que conoce los significados reales (y no los imaginados en occidente) de los signos animales, no cabe duda ninguna que yo tengo mucho pero mucho más de perro que de dragón. Así y todo siento desilusionarla…
Enzo, seria tan amable de decirme en qué texto clásico de astrología Ba Zi Usted encontró que los signos anuales son diferentes en el hemisferio sur? ¿Y qué hacemos los que vivimos muy cerca de la linea del ecuador?
Omar, gracias por sus interesantes preguntas. La primera ya está contestada en la zona principal de nuestro sitio web, y la segunda la contestaré dentro de poco, en la medida de mis disponibilidades de tiempo. Saludos
Estimado Enzo, leyendo este comentario a Liliana, ustedes tienen en la página el horóscopo chino, de repente también mi signo ha cambiado, cómo puedo averiguar eso. De todas formas le indico que yo nací el 02 de julio de 1966, y hasta ahora sé que soy caballo de madera. ¿estaré en lo cierto?
muchas gracias por leer mi consulta.
muchos saludos, y mil gracias por esta excelente página, sí lamento mucho que en Concepción no estén estas disciplinas. Los felicito!!
Claudia, efectivamente Ud. no pertenece al caballo de madera, apróntese para tener su propia pequeña desilusión… pues Ud. por haber nacido en el hemisferio sur es… ¡ratón de metal! Aunque, le digo, esta es una desilusión curable, porque si estudiara las características del signo ratón, vería que se las trae el roedorcito chino… y por supuesto que nada tiene que ver con la imagen que nosotros tenemos del ratón en occidente, con decirle tan sólo que el magnífico caballo ese que Ud. creía ser… tiene pavor del ratón… Si se le ha desperatdo la curiosidad sobre el tema, ¿por qué no toma nuestros cursos…? Tras sólo una semana del curso básico queda ya capacitada para estudiar conmigo Los 4 Pilares del Destino, donde se aprenden las bases del calendario chino de los signos animales, lo que significan y la forma de calcularlos.